Advertencia:

En esta página se comparten materiales que pueden servir de ayuda a otros profesionales. En ella también se ofrecen orientaciones generales y se responden a dudas generales que pueden ser utilidad para el lector. Si bien, esta página, nunca deberá sustituir a la pertinente consulta presencial con el especialista (logopeda, psicólogo, psicopedagogo....según el caso), que, en caso de dificultad, debe ser el que, tras una valoración, oriente sobre las necesidades y pautas que mejor se ajusten a las circunstancias y características de cada situación en particular.

sábado, 28 de noviembre de 2015

10 BLOGS DE ORIENTACIÓN EDUCATIVA E INTERVENCIÓN PSICOPEDAGÓGICA


La botica del orientador



Oratio Orientación


Dislexia, investigación y trabajo



Ayuda para Maestros



La carpeta de Rufino



Orienta2


Si no me conoces, ¿por qué me sonríes?



¿QuéduQue-QuéduCuándo?


Familia y Cole



Desorientados


MI NUEVA ADQUISICIÓN

Hoy os quería enseñar mi nueva adquisición. 

Se llama "Emotiblocks" y es de Miniland Educational. 

Tiene la particularidad de que, a parte de que a mi me gustara en el momento de comprarlo, ha sido galardonado como el mejor juguete 2015, concedido por la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes, por medio de un jurado de expertos en pedagogía, psicología, educación, diseño, medios de comunicación y asociaciones de usuarios.

Se trata de un juego muy útil para familiarizarse de forma divertida con las primeras emociones, creando simpáticos personajes, mediante la observación y la manipulación. Pueden jugar con este juego niños/as desde los 2 años. 

El juego consta de:  
  • 6 personajes que pueden montarse simultáneamente, pero con más de 100 posibles combinaciones. Cada personaje se compone de 1 cuerpo, 1 rostro y 1 peluca. 
  • 6 tarjetas de actividades de juego.
  • 1 guía didáctica 
  • 1 maleta de cartón para recoger el juego. 

¿Cómo se juega?

Los niños se familiarizarán con los personajes, poniendo todos ellos en el centro de la mesa. Podemos ayudarle a identificar las piezas, para saber de qué parte del personaje se trata y qué color tiene. De esta manera estimularemos el vocabulario. Podemos hablar de las características de cada personaje (tipo de pelo, tono de piel, género, gesto facial....). Podemos clasificar los personajes atendiendo a diferentes criterios como emociones buenas y malas, por colores, por género.... El lenguaje corporal también es muy importante. Ejemplificaremos cómo cambia nuestro rostro, el lenguaje corporal y la voz con cada una de las emociones y podemos imitarlas y asociarlas a distintas circunstancias que las pueden provocar. 
Con las tarjetas haremos lo mismo, presentárselas una por una e iremos describiendo lo que vemos. 

Existen otras formas posibles de juego. 
  • Se entrega al niño la tarjeta de emoción por la parte delantera, deberá identificar y verbalizar la emoción y tras dar la vuelta a la tarjeta, reconocer cuál de las tres alternativas presentadas representa la emoción que han visto en la parte delantera de la tarjeta. Podemos buscar la pieza que se corresponde con dicha emoción. 

  • Presentar al niño una tarjeta y construir el personaje con los bloques de construcción correspondientes. 


  • Juego de azar, emparejamiento y ensamblaje: se disponen aleatoriamente los rostros de los perosnajes encima de la mesa y boca abajo, sin que se vea la emocion/gesto. Por turnos se gira un rostro del personaje, se juega a ensamblar el rostro del personaje y finalmente debe emparejarse con su tarjeta de la emoción correspondiente. 

  • Juego de imitación: el niño imitará el gesto de la tarjeta seleccionada. Cuando juegan dos niños o más, se entrega una tarjeta a cada uno (sin que los demás lo vean) y por turnos deben imitar el gesto. El resto de los niños intentarán adivinarlo, ganando el antes lo diga. 
  • Juego de empatía: Asociar emociones con situaciones que las pueden provocar. Podemos estimular y animar al niño/a a que describa cómo se siente el niño de la imagen y que recuerde aquella vez en la que él mismo se sintió así. ¿Por qué se sintió así?, ¿Qué le ocurrió?
  • Inventar historias en las que los personajes hablan entre si, expresando cómo se sienten. 
  • Inventar frases y emitirlas modulando la voz en función de la emoción. Es decir podemos decir la frase enfadados, tristes, contentos, asustados o asombrados.
  • Adaptación al clásico "quién es quién"
  • Construir personajes siguiendo instrucciones, para trabajar la memoria y comprensión de instrucciones.
¿Qué trabajamos con este juego?
  1. Reconocimiento e identificación de los gestos faciales.
  2. Reconocimiento e identificación de las emociones básicas. 
  3. Aprendizaje en valores: tolerancia, empatía, diversidad racial....
  4. Adquisición del vocabulario.
  5. Expresión oral. 
  6. Comprensión de instrucciones. 


lunes, 9 de noviembre de 2015

ENTONCES.....¿QUÉ HACEMOS CON LOS DEBERES?

Hace un par de días tuve ocasión de leer una entrada de la neuropediatra María José Mas Salguero que responde al título de "Deberes y Aprendizaje". 

También desde hace ya unas jornadas corre como la pólvora por Internet y las redes sociales un vídeo que, a pesar de que este debate no es nuevo, a pocos ha dejado indiferente. Fue precisamente este vídeo el que llevó a la autora de la entrada a reflexionar sobre el tema de los deberes. El vídeo al que me refiero es este:



El debate "deberes si, deberes no" ha llevado a opinar a muchos expertos, especialistas, docentes, padres....., está muy de moda, y lo seguirá estando por mucho tiempo. 

Antonio Márquez Ordoñez opina a propósito de la entrada mencionada al principio que:  



Lógicamente como todo el mundo, para ser profesional del ámbito psicopedagógico he tenido que pasar antes por el colegio, y he tenido que pasar por la obligación de hacer los deberes a diario. Haciendo memoria, recuerdo mis interminables tardes haciendo deberes, las cuales no me dejaban tiempo para jugar o realizar otras actividades extraescolares. Yo al menos, no podía con todo, o dedicaba las tardes para hacer deberes o las dedicaba a las actividades extraescolares o jugar, las dos cosas no podían ser, y mis padres como "buenos padres" y yo como "buena chica" tenía que decantarme por, como decía aquel dicho, primero la obligación y después la devoción. 
A medida que avanzaba de curso, la carga era aún mayor, y la cuestión ya no era elegir deberes o actividades extraescolares, la cuestión era elegir o hago los deberes o estudio la materia para llevarla al día, porque claro, constantemente me asaltaba la bienintencionada recomendación de mis profesores de "hay que estudiar al día, no se puede estudiar todo el último día antes del examen", pero al mismo tiempo, no se te ocurriera no llevar los deberes sin hacer, porque ello era sinónimo de no ser "trabajador/a" y la consecuencia era un cero o un "negativo" como castigo. 
Cuando pasé a la universidad las cosas cambiaron mucho, dado que, como estudiaba lo que había elegido y ya no había que hacer deberes, tenía tiempo de sobra para dedicarme a preparar las asignaturas, asimilarlas y entenderlas, a mi ritmo, y ello se tradujo en mejores resultados académicos.  
Lo que estoy narrando no me ha supuesto ningún trauma, pero también es bien cierto que no me resultaban agradables aquellas circunstancias. 

Como en todo, hay expertos, especialistas, docentes y padres que están a favor de los deberes y otros que están en contra. 



Yo no puedo posicionarme radicalmente en contra o a favor de los deberes. 
  • En primer lugar, y de acuerdo con A. Marquéz, creo que habría que introducir en el debate la pregunta "¿deberes para qué?. 
  • Los aprendizajes requieren ser organizados, secuenciados y repetidos para que puedan instalarse en la memoria a largo plazo, pero al mismo tiempo es necesario que los niños los entiendan y les resulten significativos, para lo cual es necesaria la experimentación más allá de los libros de texto.
  • Los que hoy día trabajamos en el sector educativo también hemos sufrido los deberes y aquí estamos, sin embargo las tendencias cambian, porque en aquella época no se cuestionaban con tanta fuerza. ¿Acaso los niños de mi época no merecían descanso o aprendizajes significativos?, ¿No necesitaban los niños de antes jugar o moverse?
  • No creo que sea malo hacer deberes, pero sin excedernos y siendo equitativos a las necesidades y, sobre todo a las posibilidades de cada alumno, para evitar que se hagan interminables y que permitan tanto a padres como a hijos disfrutar de otras actividades también necesarias. 
  • Los niños han de ser autónomos al realizar los deberes. Si no pueden ser autónomos y necesitan la ayuda de los padres y/o profesores particulares es porque quizá en las aulas no se está procediendo del todo bien. 
  • Siempre he defendido que el proceso de enseñanza-aprendizaje hay que darle un cierto toque lúdico, pero con límites. A mi modo de ver, los valores como la disciplina, el esfuerzo y la constancia también son imprescindibles y están, en algunos casos, en horas bajas. No creo que flexibilidad, experimentación y dinamismo tengan que estar reñidos con esfuerzo, constancia y disciplina. La motivación y el interés es fundamental para que se produzca el aprendizaje, pero no podemos protegerles de algo tan real como que en la vida no siempre todo lo que hacemos nos encanta. 
  • No es coherente quejarse de la alta carga de deberes y sin embargo alarguemos la jornada de los niños hasta las ocho de la tarde con un montón de actividades extraescolares, que también requieren esfuerzo extra, que cansan al niño tras un largo día (aunque guste) y que en algunos casos tampoco son de su interés. En este caso también habría que preguntarse "¿actividades extraescolares, para qué?"
  • Los niños no están trabajando ocho horas en el colegio, aun ni en los casos en los que salen a las 17:00h. Por ejemplo, en la Comunidad de Madrid, hay muchísimos colegios públicos en los que la jornada es intensiva y los niños terminan a las 14:00h, por lo que desde esa hora, la tarde puede dar mucho de si para hacer muchas cosas, entre ellas, trabajar un ratito.
En esta entrada, nos dicen que a la hora de mandar deberes para casa, los docentes han de tener en cuenta una serie de principios que resumo a continuación:
  1. Los deberes no han de usarse como un castigo ya que haciendo esto los estudiantes dejarán de verlos como una oportunidad para aprender (Cooper y cols., 2006). Por otra parte, la no realización de los deberes ha de tener una respuesta por parte del profesor. De otra forma, los estudiantes dejarán de tomárselos en serio (Muij y cols., 2011).
  2. Los deberes han de ser evaluados y devueltos a los estudiantes lo antes posible. Los deberes no corregidos lanzan a los estudiantes el mensaje de que lo importante es hacer los deberes, no cómo hacerlos (Muij y cols., 2011). A su vez, es más efectivo mandar menos deberes pero corregirlos después que más deberes sin corregir (Ornstein, 1994). Sobre el tipo de corrección, es aconsejable que ésta sea instructiva y no una mera puntuación.
  3. Los deberes son más efectivos si: (a) están integrados en la lección (Muij y Reynolds, 2011); (b) no son ni tan difíciles que conducen a la frustración ni tan fáciles que aburren (Carr, 2013); (c) refuerzan ideas centrales del currículum y, por tanto, la mayor parte de los estudiantes son capaces de completarlos sin ayuda (Cooper, 2006); (d) se usan experiencias y materiales de la vida real que ayuden a los estudiantes a recordar más fácilmente qué han aprendido en el colegio (Boers y cols, 1995); (e) los alumnos tienen claro qué han de hacer antes de salir del aula. Para ello, es aconsejable que el profesor haga conjuntamente con los estudiantes algún ejercicio de los mandados para casa a modo de ejemplo (Carr, 2013).
  4. Los deberes no tienen por qué ser una actividad solitaria sino que también pueden pedirse como actividad en grupo, siempre y cuando el profesor esté seguro que de sus estudiantes tienen las habilidades necesarias para trabajar de forma cooperativa (Muij y Reynolds, 2011).
  5. En lo referido a deberes, más no tiene por qué significar mejor (Trautwein, 2007). Dicho esto, la evidencia muestra que lo más recomendable es que los estudiantes de primero a cuarto de primaria dediquen un máximo de 20 minutos diarios a hacer deberes; los estudiantes del último ciclo de primaria dediquen un máximo de 30-40 minutos diarios; y los estudiantes de secundaria dediquen un máximo de 90 minutos diarios (Muij y cols., 2011).
  6. En el caso de alumnos con dificultades de aprendizaje, el profesor ha de adaptar la complejidad de los deberes a las necesidades de dichos alumnos (McNary y cols., 2005).
  7. Es aconsejable que los profesores se coordinen entre sí para asegurarse de que no sobrecargan a los alumnos con deberes (Carr, 2013).
  8. Es recomendable que los profesores promuevan y refuercen en el aula el uso de agendas u otros herramientas para planificar el tiempo e informar a las familias sobre los deberes (Carr, 2013). Esto contribuirá a desarrollar habilidades de auto-regulación en los alumnos.

sábado, 7 de noviembre de 2015

BINGO, MEMORY Y DOMINÓ CON FIGURAS TÁNGRAM

Hoy os traigo un triple material. He elaborado un bingo, un memory y un dominó en base a figuras geométricas que, agrupándolas de determinada manera forman una figura. 



Con estos materiales podemos trabajar aspectos como:
  • Memoria visual (en el caso del memory)
  • Atención y funciones ejecutivas.
  • Orientación y organización espacial.
  • Asociación y lógica. 
DOMINÓ

La mecánica es la misma que la de cualquier dominó, pero en este caso, el niño/a tendrá que asociar la figura con las distintas formas geométricas que la componen, que aparecen descolocadas. 


Si no puedes descargarlo, prueba aquí

BINGO

Igual que en el caso anterior, la mecánica es la misma que la de cualquier bingo, pero esta vez, hay que asociar la figura con las distintas formas geométricas que la componen, que aparecen descolocadas. 
Podemos hacerlo de dos maneras, presentando los tableros con las figuras y que cuando les enseñemos las formas geométricas descolocadas tengan que identificar a qué figuras corresponden, o al revés, presentando los tableros con las formas geométricas descolocadas, y cuando le enseñemos la figura, busque qué formas geométricas son las correctas para formar esa figura. 


Si no puedes descargarlo, prueba aquí


MEMORY


Se trata del memory de toda la vida, pero asociando y recordando las figuras y las formas geométricas que se correspondían en cada caso, el hecho de tener que recordar, complica la cosa bastante. 


Si no puedes descargarlo, prueba aquí